Se registra una caída sin precedentes del número de los británicos que son capaces de comprar su primera casa, informa The Move Channel. Según un informe de expertos del sector, hay una disminución drástica de las familias jóvenes que pueden tener casa propia.

Según los datos del primer semestre de 2014, las compraventas de primeras viviendas han sido un total de 296.200. Esto es muy por debajo de las estimaciones demográficas. Los expertos opinan que es necesario que se presente un plan a largo plazo para apoyar a los jóvenes, mientras la protección financiera permanente sustituye a las medidas temporales de ayuda.  Una medida de primer orden es facilitar las condiciones de financiación.

El mercado hipotecario en el Reino Unido es relativamente estable y muestra signos de recuperación, pero aún está lejos de ser normal. Incentivos, tales como la asistencia  para adquisición de vivienda, son esenciales para contrarrestar las condiciones de préstamos estrictos.

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