Los rusos son unas de las nacionalidades que más viviendas compran en España y su número sigue creciendo. Su importante ascenso empezó con el lanzamiento del proyecto “Visa dorada” con el que los ciudadanos no europeos tienen la posibilidad de conseguir residencia. La condición es llevar a cabo compra de inmueble a partir  de 500.000 euros o realizar inversión de un millón euros a proyectos empresariales de interés general. Desde el inicio del año 2014, el número de los rusos que han adquirido propiedad en España ha subido un 62 %, respecto el mismo período del año pasado.

Uno de los motivos del creciente interés de los rusos hacia inmuebles en España es la caída drástica de los precios, que atrae clientes de clase media. A pesar de las diferencias culturales,  los rusos son unos de los inversores más preferidos. Los inmigrantes de este país están en edad activa y aportan beneficios a la economía del país, generando nuevos puestos de trabajo.

Paralelamente a la subida de los residentes rusos, baja el número de los otros extranjeros en el país. Un 7,8% de descenso han experimentado los ciudadanos de otros países, que en cifras es más de medio millón de residentes. Según las estadísticas nacionales, los británicos y los alemanes han reducido un 25% su presencia en España, seguidos por los franceses (13%). La causa, según los expertos, es evidente- la profundización de la crisis económica.

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